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Eiyuu no Musume to Shite Umarekawatta Prólogo - Parte 3

> Prólogo Parte 3: El principio del fin.

Hubo una vez una crisis que cayó en el mundo.

En ese mundo, habían nueve reinos en un solo continente. Cada uno con un exquisito equilibrio militar, ellos, los nueve reinos, habían construido el mundo en una paz transitoria. sin embargo, eso fue solo hasta hace diez años que la paz colapsó.

Fue alrededor de ese tiempo en que el maligno dragón apareció en la frígidas tierras del Norte. El maligno dragón que se posó sobre uno de los reinos del Norte se llamó, Colchis, y este era temido por todos. Tan fácilmente como si arrancara el pétalo de una flor, el dragón comió y dispersó a la gente con facilidad; llevando al reino al borde de la destrucción. En esa coyuntura, varios reinos se unieron y formaron un ejército para subyugar al maligno dragón.

Sin embargo, en la pradera, el maligno dragón era un ser invencible. Sus escamas de lustre negro eran mucho más duras que el acero, lo que hacía que el maligno dragón fuese difícilmente dañado por las puntas de acero de las ballestas. Desde una altitud que ni las espadas ni las lanzas podían alcanzar, el maligno dragón podía liberar un aliento al rojo vivo que era capaz derretir sus armas de acero y cremar a la gente en un instante.

La guerra contra él había concluido demasiado unilateralmente con la destrucción de la alianza conjunta del reino. Por otro lado, el maligno dragón estaba furioso con el resultado. Los humanos, su comida y sus juguetes, habían conocido los colmillos de él. Eso fue imperdonable.

Sin cansancio alguno, el maligno dragón había llegado inmediatamente a la capital del reino, incinerando el castillo junto con todos los estados. Insatisfecho con eso, extendió sus alas hacia los países vecinos, devastando todos los asentamientos que se encontraban en su vista.

Como resultado de este evento, tres reinos del norte se derrumbaron en un abrir y cerrar de ojos. Después de su caída, los seis reinos restantes no tuvieron más remedio que aceptar que el mundo estaba en crisis.

Sin embargo, no había nada que pudieran hacer. Incluso con un gran ejército, no podían dejar un solo rasguño en el cuerpo del maligno dragón. Entonces, ¿Cómo podrían ellos subyugar al maligno dragón? Además, si no mataban al dragón, incendiaría todos los reinos en forma de represalia.

Si todos movilizaban sus fuerzas armadas para otro ejército conjunto, habría una represalia. Es decir, sin sus ejércitos, el poder de combate que protege a cada reino sería insuficiente. Los líderes de los reinos que estaban preocupados con este dilema finalmente habían encontrado una solución.

Ellos seleccionaron a una sola persona que poseía el mayor poder de combate de cada reino. Estas seis personas debían ser insertadas en un escuadrón independiente, errante, que no tuvieran ningún vínculo con los reinos pero que poseyeran el mismo propósito de matar al maligno dragón. Con la esperanza de que el dragón no viera al escuadrón independiente como un acto de guerra contra él, los reinos podían depositar su fe en los seis y fortificar sus propios reinos con el poco respiro que habían comprado.

Al estancarse sus principales fuerzas armadas, creyeron que el pequeño escuadrón podía actuar en secreto, obteniendo el elemento de sorpresa. La deficiencia de un número más pequeño podría compensarse si el grupo peleaba dentro de la cueva que el dragón reclamaba como su guarida. Ellos, los reinos, habían considerado que sería más fácil tratar con el dragón maligno dentro de la cueva, porque no podría volar hacia el cielo si estuviera dentro de la cueva.

Por lo tanto, se eligieron seis héroes de cada uno de los reinos.

De uno de los seis reinos, un héroe humano que sostenía una espada sagrada Lyell;

De uno de los seis reinos, un guerrero enano que sostenía un escudo sagrado: Gadols1;

De uno de los seis reinos, un elfo que dominaba cada magia, Maxwell;

De uno de los seis reinos, un santo humano quien podía curar y sanar cada herida y lesión a menos que el herido o los heridos perezcan-Maria;

De uno de los seis reinos, una sabia semi-gata que la gente dijese haber hecho mil vidas dispersas en un solo mes: Cortina;

De uno de los seis reinos, un asesino mitad demonio que fue conocido infamemente como "Shadow Feather" -Reid.

En alineación con las expectativas de los altos cargos, después de luchar una batalla feroz, ellos, los héroes del escuadrón, subyugaron al maligno dragón, Colchis. Sin perder un solo miembro, sus logros sin precedentes fueron más allá de lo esperado; a tal punto que sus países de origen no sabían qué hacer con ellos.

Las reputaciones de Lyell y Gadols habían sacudido el trono, y las personalidades de María y Cortina sobrepasaron la influencia del Papa y de los altos cargos en ese momento. Todas las posiciones de los seis héroes eran incontrolables. Por eso, los altos cargos temían de la venganza de los héroes. Y, sobre todo, de los asesinatos de Reid...

Entre los seis héroes, el héroe Reid era una existencia heterogénea. A pesar de ser un asesino, él no era alguien malo. Él, quien luchó y mató según su justicia, fue temido para siempre. Sus criterios para el bien y el mal siempre se basaban en su propio sentido de justicia, y eso marcaba la línea entre Reid y los altos cargos.

Originalmente, tales rasgos emocionales, raciales e imprudentes habrían impedido su admisión en el escuadrón, sin embargo, se reconoció su poder de lucha, y el mundo estaba en un momento de guerra. Por lo tanto, fue seleccionado como un héroe, incluso podría decirse que fue elegido como una carta de triunfo para la humanidad.

Al final, los seis héroes fueron expulsados de sus reinos con el pretexto de que era por el bien de la restauración de los tres reinos en ruinas. Aunque fue un evento que les fue designado, la Sabia, Cortina, ya había predicho ese escenario con anticipación.

Por supuesto, a fin de mitigar el espíritu de rebelión de los héroes contra los reinos, cada país les había otorgado recompensas. Cada héroe sabía tácitamente las verdaderas intenciones de los altos cargos. Sin atreverse a decir eso, se habían quedado en silencio en una región remota.

No estaban interesados en el poder; solo querían pasar el resto de sus vidas en paz sin involucrarse en la lucha política.

Sin embargo, los momentos finales de su camaradería llegarían inevitablemente.

Se dió con el matrimonio entre Lyell y Maria. El grupo se disolvió como resultado de su matrimonio. No hubo problemas con respecto a su unión, pero marcó un punto de desviación para todos ellos. Después, surgió algo.

Ellos, quienes poseían habilidades excepcionales, no podían adaptarse a estar con otros aventureros, porque sus puntos fuertes eran demasiado para los demás. Además, Gadols cumplió su sueño de tener su propia tienda y se retiró. Casi toda la fuerza principal del grupo se retiró. Incluso Maxwell ya había regresado a su reino natal y se volvió educador, además de los asuntos nacionales. Solo Reid y Cortina, que no tenían a dónde ir, continuaron como aventureros.

Poco después, hubo un incidente donde Reid tuvo que luchar solo contra un demonio, y perdió su vida ese día. Los refuerzos no llegaron a tiempo, y Cortina, que se quedó sola, también se retiró estando desesperada. Maxwell luego se sustentó de la enseñanza en su recién fundada Academia Mágica como presidente de junta. En otras palabras, todos los héroes habían dejado el protagonismo.

Y luego el tiempo pasó... diez años después.

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